Un diente con absceso es una infección causada por caries, enfermedad periodontal o un diente fisurado. Estos problemas pueden permitir que las bacterias entren en la pulpa (el tejido blando de un diente que contiene nervios, vasos sanguíneos y tejido conectivo) y pueden provocar la muerte de la pulpa. Cuando se acumula pus en la punta de la raíz en el hueso de la mandíbula, se forma una bolsa de pus llamada absceso. Si el absceso no se trata, puede provocar una infección grave en el hueso de la mandíbula, los dientes y los tejidos circundantes.
Los síntomas de un absceso incluyen:
- dolor
- hinchazón
- enrojecimiento en las encías
- mal sabor de boca
- fiebre
Un diente con absceso se puede tratar con varios tratamientos, según la gravedad de la infección. Estos son algunos de los métodos de tratamiento que un dentista puede considerar:
- antibióticos, para destruir las bacterias que causan la infección
- drenaje de la infección
- limpiar el espacio entre el diente y la encía si la causa es una enfermedad de las encías
- tratamiento de conducto si el absceso es causado por caries o un diente roto
Seguir buenas prácticas de higiene oral y exámenes dentales de rutina reducirá significativamente el riesgo de desarrollar un absceso dental. Si sus dientes experimentan un trauma (se aflojan o se astillan), llámenos al 832-777-7567 lo antes posible.